El Congreso de Estrasburgo marca la hoja de ruta de la economía social en la Unión Europea

Estrasburgo fue, durante los días 16 y 17, el centro neurálgico de la economía social y el cooperativismo con el Congreso sobre Emprendimiento que se celebró en la ciudad francesa ante un foro de más de dos mil personas. Allí se dieron cita, el Presidente del Parlamento Europeo, Martin Schultz, comisarios europeos, ministros, representantes de otras instituciones pero, sobre todo, entidades sociales, emprendedores, investigadores sociales de toda Europa que intercambiaron, debatieron y compartieron experiencias y proyectos.

Andalucía estuvo representada a través de la participación activa de Isabel Soto, directora de FAECTA que, junto a la Red Europea de Investigación EMES y la cooperativa de impulso empresarial Smart Ibérica traslaladaron sus experiencias en el desarrollo de proyectos e iniciativas con impacto social positivo en el ámbito del cooperativismo.

Isabel Soto, directora general de la Federación, intervino en el workshop “Revisiting capacity buiding: Strengthening Europeansocial entrepreneurs and social enterprises” exponiendo, desde su experiencia, cómo la colaboración entre los diversos agentes sociales y económicos permiten el desarrollo de proyectos sostenibles que mejoren el bienestar de la comunidad. Soto incidió en el fortalecimiento del emprendimiento social y entre las ideas que trasladó a sus homólogos y asistentes, hizo hincapié en uno de los puntos en los que, en la actualidad, viene trabajando FAECTA y que no es otro que la colaboración entre la esfera pública y privada para favorecer el desarrollo económico y social.

En este foro europeo, también se dio a conocer el trabajo que desarrolla la cooperativa de impulso empresarial, en el ámbito cultural, SmartIB. Emek Filogullari Benítez, en representación de la cooperativa sevillana, no sólo participó aportando propuestas para la economía social –que serán incluidas en la Declaración de Estrasburgo- sino que puso voz a la lucha social e iniciativas ciudadanas que se están desarrollando en la Casa Palacio del Pumarejo de Sevilla, ejemplo de innovación social en el que trabaja su cooperativa, a través de la proyección de su corto documental (ver vídeo).

La participación andaluza se cerró con las aportaciones que Rocío Nogales Muriel -de la Red Europea de Investigación EMES Network- hizo, para el texto de Estrasburgo, entorno a la construcción de una Europa más comprometida con los valores que representan las empresas de Economía Social.

Declaración de Estrasburgo

Coincidiendo con la clausura de la conferencia sobre emprendimiento social se ha publicado un manifiesto creado por los participantes, en el que se recogen las directrices para el impulso del emprendimiento social y de la economía social que se ha dado en denominar Declaración de Estrasburgo.

En los diez principios se asegura que el emprendimiento social juega un papel importante en el futuro de Europa, para poder tener un crecimiento sostenible e inteligente más justo que ponga el valor la cohesión social. También se pone de relieve que este tipo de empresas equilibran las sociedades y son agentes de cambio, por lo que las administraciones deben de tenerlas en cuenta y promover su capacidad. Así, se considera que deben estar incluidas de forma transversal en todas las políticas que promueva la Unión Europea.

La Declaración de Estrasburgo plasma el papel relevante que las empresas sociales están jugando –y van a jugar- tanto en Europa como a nivel global, no sólo en su aportación para la salida de la crisis económica, sino en el reto de seguir creando más empleo estable, especialmente para la juventud y colectivos con dificultades de inserción laboral.

La dimensión que las empresas sociales están adquiriendo quedó patente en las palabras de los distintos mandatarios europeos, que allí se dieron cita, y que cada vez las tienen más presentes en sus agendas políticas.

“Ningún otro sector ha sido tan resistente, como las cooperativas, durante la crisis en Europa”. Así manifestaba, el presidente del Parlamento Europeo Martin Schulz, su valoración sobre las empresas de Economía Social. No fue el único que ensalzó la trascendencia del cooperativismo, y el buen estado en el que se encuentra, tanto en el ámbito europeo como en el resto de países americanos y asiáticos. Las empresas sociales son un modelo innovador que, además, forman parte de la solución ante la recesión económica que padece Europa, como así lo trasladaron los comisarios de Empleo y Asuntos Sociales e Industria y Emprendimiento Laszlo Andor y Antonio Tajin. Éste último, Tajín, calificó muy positiva la aprobación de la normativa sobre contratación pública que, previa al Congreso, había aprobado el Parlamento Europeo y que introduce criterios sociales y promulga, también, la reserva de mercados para las personas menos favorecidas.

Sobre la aplicación de las cláusulas sociales a la contratación pública, FAECTA viene trabajando intensamente, en esta línea, reclamando a la Administración andaluza que las contemple en su agenda, puesto que sería y es una apuesta firme por la creación de empleo y una oportunidad para las cooperativas de trabajo. De hecho, Isabel Soto expuso en Estrasburgo que hay que visibilizar, desde las instituciones, la realidad de las cooperativas de trabajo y abrir todas las vías de colaboración -entre los diversos agentes- para acometer el desarrollo de proyectos sostenibles y políticas que tengan un impacto positivo en el bienestar de la comunidad.

Descargar la Declaración de Estrasburgo