La Unidad de Cooperativas de la OIT y el Servicio de Género, Igualdad y Diversidad han trabajado de manera conjunta para ofrecer una radiografía global sobre la provisión de servicios asistenciales desarrollados por las cooperativas. El trabajo que lleva por nombre Global Mapping of the Provision of Care through Cooperatives identifica, a través de las entrevistas y encuestas realizadas, los retos y oportunidades con los que cuentan las cooperativas en materia asistencial y aquellos recursos que necesitan para optimizar su viabilidad como empresas generadoras de empleo y proveedoras de estos servicios.
El estudio parte de un planteamiento que se está convirtiendo en clave para la agenda del desarrollo: cómo se va a proporcionar atención de calidad a toda la población, ya que este hecho supone todo un desafío de calibre mundial. En este desafío, el aprovechamiento productivo de las mujeres juegan también un papel principal, al ser –universalmente- proveedoras de atención y cuidados.
Las entidades que han elaborado el estudio parten de la idea de que las necesidades de las personas, en materia de atención y cuidados, están aumentando y volviéndose cada vez más complejas. En las últimas décadas, las tasas de envejecimiento cada vez más altas y las nuevas relaciones intergeneracionales están modificando el paisaje humano y planteando problemas profundos impulsados por cambios demográficos sin precedentes, como la previsión de que las personas mayores superen en número a los niños, por primera vez, para el 2047. Este hecho ya está sugiriendo cambios de prioridades y remodelaciones políticas que tendrán, en corto y medio plazo, su impacto en materia económica, social y de empleo. Las empresas que prestan servicios de asistencia y cuidados tendrán que estar preparadas para aportar soluciones innovadoras ante un hecho social palpable como es el envejecimiento y, en este sentido, las cooperativas son una excelente opción para cubrir las necesidades de asistencia que se presenten.
Las modalidades de trabajo asistencial actuales son diversas: desde el cuidado de niños y el cuidado de ancianos, hasta el cuidado a largo plazo de personas con discapacidad o con enfermedades crónicas. Al haber más necesidad de cuidados, el sector de los servicios asistenciales presenta un gran potencial de generación de empleo y, en especial para las mujeres.
En su análisis global, el informe concluye que las cooperativas se están convirtiendo en empresas innovadoras en la prestación de servicios asistenciales, especialmente ante la ausencia de modelos públicos viables u otras opciones privadas. Los resultados también revelan que las cooperativas ofrecen mejores condiciones de trabajo en el sector asistencial, por ejemplo en el acceso a beneficios, en la regulación de horas regularizadas, etc., especialmente para las mujeres trabajadoras.
Para la OIT, las cooperativas son importantes no sólo como medios para mejorar las condiciones de empleo sino que, también, ponen a disposición de los usuarios infraestructuras y servicios esenciales en áreas olvidadas por el Estado y las empresas más de corte capitalista. Como sugiere el informe Global Mapping of the Provision of Care through Cooperatives, las cooperativas están emergiendo como actores importantes en el sector de la atención a las personas. Sin embargo, y a pesar de que surgen como una opción en el cuidado, se enfrentan a barreras significativas que limitan su potencial. En este sentido, es importante que las cooperativas cuenten con apoyo desde dentro. Para ello, las alianzas estratégicas, la intercooperación, el compartir las buenas prácticas se erigen como elementos cruciales para que puedan avanzar y proporcionar servicios de calidad y oportunidades de empleo en el sector de la atención asistencial.
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