Vanessa Bernad González, nacida en 1973 en Córdoba, es Ingeniera Agrónoma -en la especialidad de ingeniería rural- por la Universidad de Córdoba y técnica superior en Prevención de Riesgos Laborales.
Desde junio de 2012 desempeña su labor profesional en la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo como Directora General de Autónomos, compaginando esta labor con la de Directora Gerente de la Fundación Andalucía Emprende. Con anterioridad, ha ocupado diversos puestos de responsabilidad en la Administración pública, entre los que se encuentran la Dirección Gerencia adjunta de la Fundación Andalucía Emprende, la Asesoría Técnica de la Dirección General de Desarrollo Sostenible del Medio Rural, la Subdirección de Infraestructuras y Desarrollo Rural y la Jefatura del Área de Ingeniería en la Empresa Pública Desarrollo Agrario y Pesquero de la Consejería de Agricultura.
1. ¿Cómo está afectando el contexto económico actual al desarrollo de la cultura emprendedora en Andalucía?
La crisis económica está provocando un cambio tanto en el perfil, como en la tipología y las necesidades que plantean los nuevos emprendedores. Mientras las posibilidades de nuevas inversiones empresariales han mermado, la necesidad de buscar salidas a la grave situación de desempleo continúa favoreciendo el crecimiento de iniciativas empresariales de autoempleo, sobre todo de tipo autónomo. Además, muchos de los jóvenes proyectos nacen ahora más de la necesidad de buscar una vía de acceso al mercado laboral que de la convicción emprendedora, lo que incrementa el riesgo de fracaso. Por su parte, las empresas ya consolidadas siguen siendo más cautelosas y reacias a iniciar nuevos proyectos de ampliación o modernización, aunque sí requieren ayuda y asesoramiento en facetas que, hasta ahora, eran más fáciles de resolver con iniciativa propia, como la financiación externa, la expansión de mercados, la cooperación o la resolución de situaciones financieras delicadas por la caída de ingresos. Por todos estos motivos, cobra ahora más importancia que nunca la prestación de servicios de apoyo a emprendedores y empresas como el asesoramiento técnico especializado, la formación en gestión empresarial o la tutorización. Y por eso desde Andalucía Emprende, sobre la base de nuestra experiencia, estamos reforzando la prestación de estos servicios, que ofrecemos en más de 200 Centros de Apoyo al Desarrollo Empresarial que tenemos en toda la Comunidad.
2. FAECTA está promoviendo el cooperativismo de trabajo como alternativa empresarial en los municipios andaluces, ¿cree que es posible afianzar la colaboración entre ambas entidades para apoyar este objetivo?
Sin lugar a dudas. El fomento de la economía social forma parte de las líneas de actuación de Andalucía Emprende por los beneficios que reporta para el tejido productivo esta forma de organizarse empresarialmente. De hecho, ya tenemos en las provincias de Córdoba, Málaga y Sevilla Centros de Apoyo al Desarrollo Empresarial especializados en la prestación de servicios de apoyo a la creación y consolidación de cooperativas y sociedades laborales que son fruto de una estrecha colaboración con vuestra federación y con CEPES-Andalucía.
3. Los CADES son una pieza fundamental en la promoción del emprendizaje, ¿cómo se está potenciando la generación de cooperativas de trabajo en estos puntos?
Precisamente, a través de la cooperación con las entidades más representativas de la Economía Social, como es la suya, y con la habilitación de esos CADES específicos que acabo de comentarle, en los que prestamos servicios técnicos cualificados y muy especializados, para lo que contamos con profesionales altamente cualificados, que tienen una amplia experiencia adquirida a través de años de dedicación y formación en esta materia.
4. Según los datos del Ministerio de Empleo, el empleo en las cooperativas andaluzas ha aumentado más de un 18% en el cuarto trimestre de 2012, ¿cómo valora este dato?
Indudablemente, de manera muy positiva, porque demuestra la fortaleza de la Economía Social y su capacidad de adaptabilidad en épocas de crisis. Las características que son inherentes a esta fórmula económica han demostrado ser claves para la recuperación económica, por favorecer la creación de empleo estable y promover la cohesión social. Y es que las cifras vienen demostrando que cuando la empresa está participada por sus trabajadores, prevalecen la creatividad, la innovación y la flexibilidad, y el resultado es la pervivencia de los puestos de trabajo.
5. Desde su punto de vista, ¿cómo afecta el género a la hora de crear una empresa?
Aunque se han experimentado ya importantísimos avances en este asunto, creo que el género sigue siendo un obstáculo a la hora de emprender y eso se debe, fundamentalmente, a que sigue formando parte de nuestra cultura. Está demasiado arraigado aún que los hijos y la gestión doméstica corresponden fundamentalmente a la mujer, incluso en las generaciones más jóvenes. Y eso también tiene que ver con algo que suele caracterizar a la mayoría de las mujeres: la responsabilidad. Afortunadamente, las cosas van cambiando pero tenemos que seguir luchando por conseguir la equidad y, en ese sentido, el Gobierno andaluz es plenamente consciente y está orientado todas sus medidas y actuaciones a conseguir ese fin. Concretamente, en lo que compete a Andalucía Emprende, yo tengo la satisfacción de poder contar que de las más de 10.000 empresas que impulsamos en 2012 un 43% fueron promovidas por mujeres, por lo que nos queda poquito para alcanzar la mitad. Además, apostamos por las mujeres que han decido emprender y las apoyamos con programas especializados como es la ‘Red de Cooperación de Emprendedoras’, que desarrollamos junto al IAM, para fomentar el intercambio de conocimientos y experiencias y el establecimiento de sinergias empresariales que favorezcan la competitividad de sus empresas.
6. En ocasiones el colectivo emprendedor recibe poca información sobre el modelo cooperativo, ¿qué medidas se pueden tomar para subsanar esta situación?
Fundamentalmente, la formación. Por eso en Andalucía Emprende desarrollamos anualmente unos planes provinciales en los que, junto a los agentes económicos y sociales de cada territorio, diseñamos las acciones que vamos a desarrollar cada año con el fin de informar y formar a la sociedad en general, y a emprendedores y empresarios en particular, en todas las cuestiones, aspectos y modelos relacionados con el mundo empresarial. Sin duda, entre estas acciones se encuentran talleres específicos destinados a promover la economía social, para cuyo desarrollo contamos con la colaboración de entidades como FAECTA, FEANSAL o CEPES.
