Las cooperativas sociosanitarias de FAECTA han celebrado hoy una rueda de prensa para denunciar la situación que está atravesando actualmente el sector, que en Andalucía agrupa a 173 cooperativas, y trasladar a la opinión pública las consecuencias que esto supone para las personas dependientes y sus familias-
Según señala Antonio Rivero, presidente de FAECTA, “la situación que se está planteando por parte de la Administración pone en peligro el sistema de atención a la dependencia y el mantenimiento de los puestos de trabajo, fundamentalmente de mujeres”.
Tras varias negociaciones del sector donde se debatía el futuro de la dependencia ha sido imposible llegar a un acuerdo , “ya que los criterios que se imponían están muy por debajo de los estándares que consideramos fundamentales para ofrecer un servicio de atención a la dependencia basado en la calidad ” señala Rivero.
En este sentido, Mª del Mar García Torres, representante de las cooperativas sociosanitarias de FAECTA, ha afirmado que “en nuestro sector tratamos directamente con personas que se encuentran en una delicada situación y por ello debemos evitar la precarización de recursos puesto que esto afectaría a todas las esferas de los usuarios y usuarias” apunta.
Actualmente las cooperativas que prestan servicios asistenciales en el marco de la Ley de Dependencia está sujetas a diferentes modificaciones normativas lo que supone una alteración del escenario en el que se presta el servicio, con la reducción de las cuantías que se asignan y que gestionan las Comunidades Autónomas. Además estas modificaciones pueden afectar a los precios y a los ratios, por lo que desde FAECTA se demanda el mantenimiento futuro de las tarifas y ratios actuales, la ocupación inmediata de las plazas concertadas y la reposición de plazas en residencias, unidades de estancia diurna y servicio de ayuda a domicilio para garantizar la viabilidad de estas empresas y el mantenimiento del empleo.
García Torres ha manifestado que “lo que se está produciendo actualmente es la paralización del sistema de atención a la dependencia y esto supone negar la asistencia a personas con escasos recursos y grandes necesidades asistenciales .
Desde FAECTA también se quiere destacar el retraso en los pagos por parte de la Administración, lo que está dificultando la prestación del servicio, si bien desde el sector cooperativo se está haciendo un gran esfuerzo por amortiguar una situación que ya es inviable e insostenible.
Las cooperativas sociosanitarias instan a la Administración a no dejar de lado a un sector que se caracteriza por la generación de empleo estable y de calidad, especialmente en las zonas rurales donde no llegan otras empresas, y que da empleo fundamentalmente a mujeres. “Las cooperativas sociosanitarias están en los pueblos andaluces para prestar un servicio de calidad a las personas y han hecho grandes inversiones allí donde el resto de empresas no atendían a los usuarios por falta de rentabilidad”, explica García Torres. En este sentido, desde FAECTA se alude a la necesidad de proteger a estas empresas, tal y como se recoge en la Constitución y en el Estatuto de Autonomía Andaluz, señalando que “es importante que la Junta se apoye en el sector cooperativo para la prestación de los servicios de dependencia y que ofrezca un respaldo explícito a las cooperativas sociosanitarias con el fin de conseguir un doble resultado: el mantenimiento del empleo y la prestación de servicios de calidad a la ciudadanía”. Asimismo, desde la Federación se quiere poner en valor el informe aprobado por el Parlamento Europeo sobre la contribución de las cooperativas a la salida de la crisis (más conocido como Informe Toia) que propone apoyar de manera directa a las cooperativas y proporcionar más flexibilidad en lo que respecta a las normas de contratación pública, por ejemplo, incluyendo una reserva de duración limitada. (más información)
Propuestas del sector
Las cooperativas sociosanitarias abogan por la creación de un pacto que protega el sistema de atención a la dependencia para garantizar un atención profesional y de calidad, de acuerdo a unos criterios que permitan la estabilidad de las empresas que prestan estos servicios a la ciudadanía. La puesta en marcha de este pacto también permitiría aliviar las responsabilidades del cuidado en la familia (que normalmente recae en las mujeres) favoreciendo la adaptación de medidas que faciliten la igualdad de oportunidades entre los dos sexos, al tiempo que se garantiza una atención especializada para el usuario final.
Las cooperativas son empresas participadas directamente por los trabajadores y trabajadoras que la forman y que se gestionan de manera democrática. Estas empresas no ejercen la economía especulativa y se apoyan los principios y valores cooperativos para realizar su gestión. Entre sus principales características está el compromiso con la zona en la que ejercen su actividad, la redistribución equitativa de la riqueza y la generación de empleo estable allí donde se ubican.
Asimismo, se aboga por la inclusión de cláusulas sociales en la contratación pública con el objetivo de impulsar una discriminación positiva de los principios y valores de este modelo empresarial que destaca por fijar la riqueza al territorio y prestar un servicio integral en el marco de la atención a la dependencia. Las propuestas del sector también pasan por facilitar y agilizar los pagos y por garantizar la sostenibilidad mediante la reposición de plazas tanto en residencias como en unidades de estancia diurna y servicio de ayuda a domicilio así como el establecimiento de tarifas y ratios adecuados a la prestación del servicio que se realiza en función del grado de dependencia.
En Andalucía, según datos del Directorio Central de Empresas del INE, existen 1.406 empresas correspondientes a asistencia en establecimientos residenciales y actividades de servicios sociales sin alojamiento. De ellas, 236 pertenecen al sector de la Economía Social (173 cooperativas y 63 sociedades laborales), lo que supone un 17% del total andaluz y un 3,2% del entramado empresarial de la economía social andaluza.
El sector sociosanitario en la economía social da empleo a 7.479 personas (aproximadamente 6.500 en cooperativas), lo que supone un 11,1% del empleo que genera la economía social andaluza. Podemos observar cómo un 3,2 % de las empresas generan un 11,1 % de empleo, por tanto son más intensivas en personal que otros sectores. Las cooperativas sociosanitarias, según datos estimados, cuentan con 2.150 plazas residenciales, 1.000 plazas de unidades de estancia diurna y presta servicios de ayuda a domicilio a 14.830 personas. Dentro del programa de Envejecimiento Activo, las cooperativas sociosanitarias atienden a 1.900 personas. Se estima que el total de personas atendidas por estas cooperativas alcanza los 20.000 usuarios.
